Es sabido que en la actualidad estamos expuestos a constantes y elevados niveles de estrés en nuestro entorno, y de no encontrarnos fortalecidos física y mentalmente en esos momentos, amenazan con incidir desfavorablemente en nuestro nivel de salud, pudiendo traducirse, entre otras, en distintos tipos de afecciones y/o enfermedades mucho antes de lo que pensamos. El concepto de salud tiene directa relación con este punto. La organización Mundial de la Salud (OMS) la define como “un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente de ausencia de afecciones o enfermedades.
Existen tres aspectos fundamentales, correspondientes a los tres niveles de bienestar definidos por la OMS, los cuales si nos decidimos a poner en practica con regularidad, nos permitirá contar con un mejor y elevado nivel de salud, de modo integral y sin gran esfuerzo:
Nuestro cuerpo, Manteniendo en buena forma a través de una buena nutrición, evitando exponerlo a agentes contaminantes como el ruido, los gases, la radiación y temperaturas extremas.
Nuestra mente, Permitirnos un espacio de conexión con nosotros mismos, en el cual cultivemos el descanso, el agradecimiento y los principios.
